De izquierda a derecha: Andre, Savoir Faire, Galvanii y Jaime Alvarez. Acerca de Savoir Faire les pongo la nota que aparecio en Pulso el día 17 de abril...(Llegó a San Luis por casualidad, siguiendo los pasos de su esposa potosina. Despojado de toda presunción y formalismo, el violinista norteamericano Savoir Faire afirma que vino a México a conocer su cultura musical. “Los artistas viven para el arte, y México está lleno de eso”.
Jazzista de academia, en su natal Chicago, y sentado en la esquina de la improvisación, Savoir cuenta a PULSO su trayectoria en una charla franca y sincera. Se ha reunido a tocar con leyendas del jazz como Roscoe Mitchell (saxofonista), Vincent Davis (baterista), Kenny Burrel (guitarrista) y los hermanos Marsalis (trompeta y trombón), entre otros, pero su fascinación no tiene límites.
A su arribo a la capital potosina, hace unos meses, el jazzista se hizo cómplice de Jorge Martínez Zapata, uno de los más grandes músicos que ha dado México. Savoir confiesa su pasión por la música tradicional mexicana, como el son y huapango. “Jorge ha fusionado el jazz con estos ritmos para difundirlos como una propuesta fresca, a México se le conoce por la música grupera y el pop, pero no hay otra alternativa, me interesa ese proyecto, quiero conocer su música para compaginarla con lo que yo sé hacer”, afirmó.
Para demostrarlo, dejó a un lado la trayectoria en Chicago, donde grabó 13 discos en forma independiente (el más reciente es “Running out of time”) y participó en proyectos de leyendas del jazz, para sumarse al proyecto musical “Huazzteco” y al grupo de salsa “Son Caribe”, con los que se presenta cada fin de semana en diferentes antros de la capital.
“No quería ser un músico más en Chicago, ya hay muchos. Luego de grabar mi último disco, “Running out of time”, a principios de este año, comprendí que quedarme allá no me traería un beneficio adicional, no me haría más famoso o más rico, la pregunta era ¿a dónde debía partir?, y seguí a mi esposa, que vino a su tierra, Ciudad Fernández, escapando del frío que hace allá en invierno”.
Con el violín en la maleta, llegó entonces a tierras potosinas. Su pasión por el arte lo llevó a contactarse con Alberto Gutiérrez, creativo del programa “Tiempo de Jazz”, quien a su vez, lo presentó con Jorge Martínez Zapata. Al compartir ideas con estos especialistas, se “prendió la mecha” de hacer algo nuevo.
Habla de la técnica: “Hay muchos músicos de jazz, pero sólo hay cuatro jazzistas de violín en el mundo, Milt Jakson es uno de ellos. Hay pocos violinistas porque es difícil improvisar con este instrumento, es pequeño y no tiene espacio para el swing, necesitas saber la teoría, la técnica y lo principal, saber la historia del jazz, qué es y hacia dónde va”.
Savoir dice que no tiene un estilo definido y lo refrenda al tocar en un grupo de jazz y uno salsa a la vez, y al afirmar que su disco recorre un poco la historia de su vida, con temas dedicados a su hija, su esposa y hasta personajes bíblicos. “No tengo estilo, estoy concentrado en todo, quiero aprender la música de México y plasmarla en mi música”.
La plática de Savoir Faire es infinita, pero el espacio es poco. De la ajetreada vida en Chicago, el músico pasó a la tranquilidad de provincia, donde se empapa de nuestro folklor, y se gana la vida tocando jazz en el trova house “Cantigas”, junto a Samuel Martínez Herrera Zapata, o tocando Salsa en “La Acequia”, junto a los hermanos Carrillo.)
Asi que ya lo saben , un violinista que decidio dejar sus clubes de jazz y una fama extraordinaria para venir a san luis a conocer nuestra musica. En el concierto estuvieron los camperos de valles y definitivamente los jazzistas tienen mucho que aprender de nuestra gente , asi como nuestra gente tiene mucho que aprender de los Jazzistas. Platicando con Savoire (samuel) me comento que Le encantaba la forma en que improvisaban los chavos de Los camperon de valles y que ahora son tambien maestros suyos. (Foto : Galvanii Files)